12 DE OCTUBRE - NADA QUE CELEBRAR

14.10.2021

Resumen del reportaje a Claudia Gotta, Secretaria Nacional de Pueblos Originarios dentro de la Asamblea permanente por los Derechos Humanos desde el año 2018. 


J A R:

Claudia ya ha estado en programas anteriores, pero por si alguien no la llegara a conocer, ella es una integrante de la Comisión por los Derechos Humanos relacionados con los pueblos originarios.


C G:

Si Juan, como vos decías, soy secretaria nacional de pueblos originarios dentro de la Asamblea permanente por los Derechos Humanos desde el año 2018, en pleno macrismo asumí esta función que me delegaron mis compañeros.


J A R:

Claudia, estamos próximos al 12 de octubre y evidentemente, es una fecha muy especial en lo que se refiere a la situación de los pueblos originarios desde el comienzo de la historia hasta este momento.

¿Qué nos podes decir al respecto?


C G:

Habría tantísimo para señalar, en principio decir que ese suceso, ese acontecimiento del 12 de octubre de 1492 marcó un quiebre, el comienzo de una larga tragedia que continua con otros ropajes hasta hoy,  que fue la invasión de los territorios libres hasta ese momento de los pueblos de Abya Yala pero que también, marco el inicio -coincido con otros historiadores- de una historia diferente para Europa, no se puede entender Europa sin América.

Quiero señalar que este fue el comienzo de un gran genocidio con  distintas etapas de la invasión, la conquista, la colonización de millones de vidas pero que además, cambio la territorialidad del Abya Yala para siempre porque con eso llego una nueva cosmovisión, como única y verdadera que impuso -o que trato de imponer- por que hasta el día de hoy, por suerte gracias a la lucha y a la resistencia de los pueblos y naciones originarias, no logró borrar las otras cosmovisiones.

Fue el comienzo de la instalación del racismo, de eurocentrismo, de una nueva forma de transmitir la historia desde este lugar, que pretende contarnos la historia del mundo continuando con la negación del otro que comenzó a final del siglo XV.

Es importante recalcar que acá hubo una invasión, no un descubrimiento. Una invasión que implicó el descubrimiento y la negación del otro. La palabra indio,  se instaló para señalar lo no europeo, lo no español, lo no portugués o, en la América del Norte, respecto a la situación de las que fueron conquistadas por el imperio británico.

Borraron la gran diversidad cultural que existía en estos territorios tanto a nivel de organización sociopolítica, en donde habían desde grandes y poderosos estados, hasta sociedades que todavía vivían en sociedad en la organización de bandas, de la trivialidad o de la jefatura que tenían diversos modos de producción y de autoreproducción de la vida material y que por supuesto, también tenían grandes diferencias con los patrones de asentamiento, desde el nomadismo, hasta ciudades complejas desde el punto de vista urbanístico que no existían en la Europa de entonces.

Hay muchísimo por desmontar - no hay nada para celebrar - es por eso que el día 12 de octubre no es el día de la raza ni el día del descubrimiento, ni es un día de celebración.

El 11 de octubre se considera como el último día de libertad de nuestros pueblos naciones originarias, es el día para repensar la diversidad cultural que seguimos siendo y que sigue siendo negada más allá de todos los medios legales que le han otorgado y reconocido, derechos humanos inalienables a nuestros pueblos pero que en la realidad no se cumplen, no se respetan. Tenemos hasta el día de hoy un genocidio por goteo -podríamos decir- en muchas de las territorialidades puntualmente, de lo que es hoy nuestro territorio como estado Nación Argentina.

Esta idea de nación que muchas veces lo hemos dicho, se construyo allá por el ultimo cuarto del siglo XIX, "finalmente como una nación deseada", homogéneamente blanca, monocultural, monolingüe que pretendió borrar a estos otros, otras, otres componentes de lo que es la población Argentina que son otras naciones, y como incluso la misma corona española en tantísimos tratados reconoció como naciones.

Esta nación nueva creada por la oligarquía terrateniente después de estas gestas también mal llamadas, conquistas del desierto porque un desierto no se conquista, se ocupa, con tantísimas expediciones en Pampa y Patagonia. Esa oligarquía pensó una nación sin otras naciones.

Desde entonces tenemos una serie de desafíos hasta este presente, desde fines del siglo XV hasta estas primeras décadas del tercer milenio, las poblaciones indígenas siguen siendo invadidas, siguen siendo saqueadas, siguen siendo despojadas de sus territorialidades y no reconocidas con todo lo que implica la riqueza de sus culturas, que además, las necesitamos porque este triunfo del eurocentrismo, la colonialidad que sigue vigente como un proceso que invade todas la áreas de la vida, nos ha llevado a esta situación a la que estamos - que no es solamente la pandemia - sino esta mercantilización de la vida, esta concepción del río como una hidrovía, todas estas cosas que hablamos en los otros programas y que la ciencia justifica, los modos de producción hegemónicos justifican, y que nuestros pueblos originarios, estas otras naciones, jamás consentirían como lógicas porque su lógica, es la de una comunión con las diversidades de la vida que siempre han tenido, sus cosmovisiones y que nosotros, deberíamos retomar para salvarnos a tiempo.


J A R:

Vos estas hablando de algo que no solo es evidente sino, que es una evidencia oculta porque si bien esta claro y cualquiera que levante la cabeza lo ve, hay toda una cuestión de tipo ideológica que se ha metido en el corazón y en el cerebro de la gente en el sentido de que ese mecanismo, del desarrollo capitalista, sobre todo en este momento con el dominio del capital financiero, es LA FORMA y a la vez EL MODO en que nuestra conciencia se va  desbaratando y perfilando en un sentido totalmente inhumano. 

Lo que pasa con los pueblos originarios es la manifestación de lo que es el dominio de un sistema de producción, de una ideología que evidentemente no para en mientes,  con tal de llevar adelante todo ese sistema de explotación y de expoliación.


C G:

Exacto Juan.


J A R:

Ahora para colmo, estamos viendo lo que esta pasando en el sur con actitudes que a mi, me dan escalofríos, porque que una fiscal y un juez, prohíban que se les pase comida y agua a aquellos que están tratando de salvaguardar su territorio me parece de una crueldad y de una falta de sentido humano que me horroriza.


C G:

Si, es que este capitalismo eurocentrado global, que comenzó a fortalecerse con la propia invasión de los territorios que hoy se llaman América, sigue estando vigente y ha sido, tan naturalizado por el sistema educativo, por los medios de comunicación y por las actitudes de nuestros gobernantes.

No es que una se sienta una iluminada, ni quienes compartan nuestra visión seamos gente que estamos en una concepción contrahegemónica, meramente utópica y aun, defendiendo las utopías que son necesarias para la liberación de los pueblos.

Han hecho muy bien su trabajo que lleva siglos, de diferentes formas de colonialismo que siguen reforzando esto.

Lo que está pasando en Punta del Ternero desde el 26 de setiembre es atroz, es tan nefasta la situación del bloqueo de la ruta 6 que no permite que llegue ropa ni alimentos, hubo muchas noches de helada y no tienen suficiente abrigo, están resistiendo como pueden en el acampe, esta situación que es inentendible, tan inentendible como las respuestas que dan a nivel nacional los funcionarios con los cuales la APH se ha reunido, y por supuesto las reacciones de las autoridades provinciales de la provincia de Río Negro que desde la gobernadora para abajo, son realmente para enjuiciarlos por lesa humanidad prácticamente.

Fernández, se limita a decir tras el pedido de la gobernadora de envío de fuerzas, no voy a enviar fuerzas federales, o que Pietragalla, diga como secretario de derechos humanos que él no puede entrometerse en asuntos de una jurisdicción provincial porque somos un país federal. Queda muy a las claras de hasta donde la clase dirigente o los aparatos políticos hegemónicos, son funcionales a los intereses de las corporaciones locales o multinacionales que vienen por todo. 

Vienen por todo desde finales del siglo XV, acá ya no llegan las carabelas, sino que llegan otro tipo de invasiones que tienen que ver con este extractivismo feroz que se traduce en la extranjerización de las tierras por millones de hectáreas en la megaminería, en el latifundio transgénico sojero, ni hablar lo que va a ser la explotación del litio en el noroeste argentino, con la complicidad de un gobierno nefasto como el de Morales en Jujuy y en tantísimas otras regiones.

Esta es la misma situación de los territorios de una colonialidad del poder y del saber, porque esto no se enseña, no se nos dice ni en los claustros académicos, ni los medios de comunicación con debates realmente serios -por lo que lo que nos estamos jugando acá es la vida-, porque los pueblos naciones indígenas han preservado en muchísimos territorios que nosotros, con los lentes colonizados vemos como pobres, la biodiversidad.

La biodiversidad natural y también la biodiversidad cultural que ellos han heredado de sus ancestros y de otras experiencias culturales milenarias. Esto es realmente muy complejo y hay que hablarlo  con esta crudeza y ponderar, la lucha indígena en defensa no solo  de sus territorios y de como los conciben, sino que los están defendiendo para todes.

Nosotros somos para las grandes corporaciones y los grandes intereses victimas de esta situación, no son los pueblos indígenas solamente, si son los que resisten, los que ponen el cuerpo, los que entregan vidas cotidianamente y los que sufren esta situación como la que esta siendo particularmente hoy, tan fuerte y tan inexplicable, en donde se vulneran los derechos humanos elementales como es la alimentación por ejemplo.

Tenemos muchísimas situaciones con falta de agua además de la de Cuesta del Ternero. El acceso al agua segura y potable que está en todas las declaraciones que hacen a los derechos humanos de las comunidades, sean o no sean indígenas, sin embargo, esto no esta garantizado.

Los grandes negociados -por ejemplo, en Salta- Aguas del Norte, subvencionada por el estado le lleva agua cuando quiere  a las comunidades para llenar los tanques, agua que ni siquiera es segura.

Estamos vulnerando muchos derechos a la vida y -digo estamos- no porque uno se sienta cómplice, sino porque uno se siente tan en falta y tan impotente ante estas situaciones que repensar en el 12 de octubre, es repensar hasta donde hemos podido cambiar algunas situaciones, porque seguimos recibiendo a los invasores, y los siguen recibiendo para hacer negocios y los pueblos originarios que eran y son los verdaderos dueños de la tierra siguen siendo las víctimas de estas invasiones.

No hay nada para celebrar, pero sí mucho para repensar y para aprender de las resistencias indígenas que es una forma de reexistir como decía Carlos Porto Goncalves, esa defensa de la territorialidad, porque no son hectáreas de tierra, son sus territorios, donde están sus ancestros, sus sitios sagrados y donde pueden seguir siendo lo que son, mapuches, wichis, mocovies, guaraníes, qom. 

Tenemos 36 naciones originarias reconocidas en nuestro país y hay algunas, que están luchando por ser reconocidas y por su puesto no olvidarnos, que el mes que viene vence la ultima prórroga de la ley 26.160   -que fue prorrogada 4 veces- que fue promulgada allá en el 2006 como una ley de emergencia para garantizar, para parar los desalojos y para poder hacer el relevamiento de todas las comunidades y, otorgarles la personería jurídica a algo que cada vez parece más lejano, porque aún, cuando logremos la prórroga, esta ley fue vaciada de presupuesto en las ultimas dos o tres prórrogas que tuvo y por lo tanto, no se siguieron haciendo los relevamientos. 

En provincias como Río Negro, yo creo que ni siquiera se efectivizo  y en otras, se hicieron en muy pocas comunidades ni que hablar.

Durante los cuatro años del gobierno de cambiemos, porque sabemos, el gran negocio que tenia Macri en la OPDE, era no efectivizar la ley 26.160 porque reconocer los derechos territoriales, impediría la continuidad de los desalojos y de la apropiación de estas tierras, que así son concebidas por el capital y el mercado -tierras, no territorios- tierra, en su concepción eurocentrada = RECURSOS.

Nosotros no hablamos de recursos, hablamos de BIENES COMUNES - BIENES PARA LA VIDA, pero para el mercado, las tierras que aún están bajo control indígena son ricas en recursos, vienen por eso y por todo, como vienen por nuestros ríos, como han venido por nuestra Pampa que ya no produce esa gran diversidad de productos que emanaban de la tierra y que eran agroecológicos sino, que tenemos prácticamente la vida canjenizada en el ámbito rural y sabemos bien, quienes son los culpables de ello.


J A R:

Yo lo que veo es que hay una violación de disposiciones constitucionales, porque nuestra constitución ampara los derechos de los pueblos originarios y aquí, se pasan todo esto "por allá adonde te dije", como si esto fuera una norma sin sustancia.

Creo que todo esto, es fruto de algo que por ahí no se ve, porque no es simplemente el ataque a los pueblos originarios, yo creo que acá hay un ataque a nuestra propia soberanía, hemos perdido el poder de decisión sobre las cuestiones soberanas de nuestro país.

Los grupos económicos, los que representan a los intereses del capital financiero se han instalado tanto en el aspecto jurídico, como en el aspecto político y en las acciones concretas, en una manifestación de lo que es el poder ajeno a los que son los intereses del país.

Creo que estamos viviendo una falta de soberanía, soberanía tanto en lo económico como en lo político.


C G:

Yo coincido mucho con esa lectura, me gano muchos enemigos cuando digo que esto  se veía tan claramente en el gobierno de cambiemos,  gobernaban las corporaciones directamente. Esto estuvo velado y sigue estando velado desde los 90, cuando eran y son los socios de quienes gobiernan, porque no olvidemos que quien es hoy nuestro canciller, fue quien hizo entrar la soja transgénica allá a mediados de los noventa y hoy hacen la transgenizacion del trigo.

Cuando hablamos de estos derechos epistémicos de los pueblos, los derechos a pensar desde otros lugares, no es para los pueblos, es para nosotros. Muchas de las cosas de la Constitución del 94 les otorgó en el art. 75 inc. 17 y demás, como la educación intercultural bilingüe. No es solamente para los jóvenes o niñez, o adultos de los pueblos indígenas, es para nosotros.

Es  un derecho poder pensar desde otras culturas que no halla sido la que invadió y la que nos conquisto y nos sigue colonizando, que nos sigue poblando en estas cuestiones de la apropiación de los bienes comunes que hoy son en el marco del orden legal hegemónico de todo el pueblo argentino,  pero que los únicos que defienden esos lugares, a veces, arrinconados, son los integrantes de las comunidades indígenas

Parecería que nosotros no solamente no podemos reaccionar sino que además, no podemos visualizar los peligros que implican los continuos arribos de las corporaciones internacionales, multinacionales o como queramos llamarles, que ya se han apropiado de toda la cordillera, que ya sabemos que está toda loteada como la Amazonia y que tienen los nombres de la Barrick, etc, etc.. Esas divisorias entre Chile y Argentina,  ya no son esas que nos enseñaban a nosotros en la escuela, no, hoy tiene el nombre de tres o cinco multinacionales mineras.

De estas cosas hay que hablar, porque esta es la perdida de soberanía, la vulneración de la soberanía es entregar todo lo que tenemos que además, es el derecho a la vida de las generaciones futuras. Estamos vulnerando los derechos de quienes vendrán, además de los de nuestros propios hijos, nietos, amores, y eso, es lo que nos están enseñando en su lucha de resistencia frente al avance del capital y del mercado en su territorialidades los pueblos naciones indígenas.


J A R:

Estoy absolutamente de acuerdo con lo que decís, creo que estos pueblos originarios se han transformado en el ultimo reducto de la lucha por la soberanía, no solamente la soberanía territorial y la soberanía política sino por la soberanía individual y propia, la de mantener los propios estilos e ideas, las propias culturas.

A nosotros nos han desculturalizado, creo que cuando vemos la lucha de estos pueblos, no solamente tenemos que ver el aspecto violento, lo tremendo que se esta haciendo desde los resortes del poder sino, que tenemos que ver que es un ejemplo de la lucha por el mantenimiento de lo propio, por el mantenimiento de la conciencia de lo que es nuestro lugar, nuestras ideas.

Estamos totalmente perdidos en el maremágnum de la sociedad de consumo y de los intereses de las grandes corporaciones y en lugar de hacer una lucha objetiva sobre esto, parecería ser, que todo el mundo quiere negociar lo que es innegociable, porque estoy absolutamente convencido, la vida no se negocia.


C G:

La vida no se vende. Hay que desmontar todo lo que nos enseñaron, eso que hemos hablado tantísimas veces, se ha cosificado a la naturaleza. Desmontar la forma en como nos enseñan a pensar el río, el monte, el cerro, que es tan diferente a estas otras cosmovisiones que los consideran lugares sagrados de vida, nosotros hemos sido tan colonizados que hemos cosificado la vida y  hemos permitido que sea mercantilizada.

En eso también se van nuestros cuerpos, nuestras vidas. El otro día hablaba en el marco de una acción lanzada por la academia del feminismo, y yo digo que el feminismo debe de ser descolonizado o no será, porque nosotros, luchamos contra un concepto de mujer cosificado que es eurocéntrico, colonizado, porque en América prehispánica hubo mujeres que gobernaban grandes estados, entonces nosotros, no tenemos que pensar en una mujer empoderada a partir de nociones que son tan ajenas de nuestras territorialidades, y no desmembrar además, esto que estamos hablando, también de lo que implica la trata, la prostitución, porque por ejemplo, en todas estas centrales portuarias, por ejemplo en Paraná, en cada una de esas centrales que creo que son 21,  17 son extranjeras, y hay prostíbulos.

Entonces, la lucha de la defensa de las mujeres y de la elección de vida de las mujeres no está desmembrada de la lucha de la invasión de las corporaciones. Tenemos que romper estas cosas que quedan después, encorsetadas en discusiones académicas en este caso, o a veces, en escenarios meramente montados porque son cuestiones de las que hay que hablar y que son políticamente correctas y que son un fraude, porque en realidad sino vemos la complejidad de esta nueva invasión -que es nueva porque tienen nuevos ropajes y nuevos artilugios- pero que son continuos en los 529 años que vienen por todo. Los pueblos naciones indígenas, lo tienen muy claro porque lo han sufrido. Las victimas son las que tienen claros todos estos problemas y en esa defensa de la vida, en esa resistencia, dan un ejemplo que nosotros debemos tomar.

Además, de eso hablan las muertes de los líderes campesinos y de las cuales después nos horrorizamos en la Amazonia, Colombia, Mejico o la de algunas muertes que han sido tan claras de esta resistencia como son los casos de Santiago Maldonado -aunque no fuera indígena- o Rafael Nahuel y la de tantos otros, que no han tenido la repercusión, nos están hablando de eso, de nuevos combatientes heroicos.

Acabamos de celebrar el día del combatiente heroico con relación a Ernesto Che Guevara , bueno, el modelo del Che tiene que ser repensado a partir de estas otras experiencias, por eso el Che fue a Bolivia, fue a África. 

África es otro lugar del que tanto hay que aprender y de la que tan poco sabemos y esto no es casual, ese lugar despreciado, el continente negro plagado de guerras étnicas por el negocio del mercado de armas, y donde siguen viviendo las coronas europeas, como la holandesa que vive de las minas de diamantes que todavía tiene en África.

¿Que seguimos enseñando en las escuelas, en la universidad y como vamos a salir de este brete? Porque no estamos mas que hablando de la invasión de los territorios en los que se nos va la vida.


J A R:

Claudia, hay algo que se me vino ahora a la cabeza, todo esto que estamos hablando hay que transmitirlo con un lenguaje profundo para los jóvenes, para los chicos que son los que tienen que llevar adelante el protagonismo en esta lucha, sino, estamos siendo los viejos de siempre los que protestamos, los que nos enfrentamos, los que gritamos. 

Tenemos que llegar a la conciencia de todos aquellos que no han visto una cosa distinta sino, que están viviendo en el medio de este maremágnum de influencia subliminal propia de la sociedad que esta dominada por las corporaciones, dominada por el capitalismo horroroso sin solidaridad, sin el sentido de lo que es la verdadera paz , sin el sentido mas profundo de la justicia porque estamos viviendo en un país con 40% de pobres y eso, también es una demostración de la carencia de soberanía porque es fruto de la dominación, es fruto de la manifestación de un poder que dejo de ser un poder público para ser un poder privado. Hemos dejado el estado en manos de los privados en vez de estar en las manos del pueblo.


C G:

Esto que vos marcas forma parte de mi militancia, porque vos sabes que aparte de ser militante por los derechos humanos dentro de la PDH y de estar frente a la secretaria de pueblos originarios soy docente universitaria y además, hago muchísimo trabajo de extención en territorios y con relación a otros sindicatos de formación docente, participando de tantísimos eventos académicos en donde hablo de estas cosas del mismo modo como lo estoy haciendo aquí con la audiencia, porque creo urgente y necesario hablar de estas cosas para desnaturalizar, y ademas, para lograr unir las grandes tragedias, esto que recién te planteaba con respecto a la lucha contra la trata y la apropiación de los territorios por parte de las mega corporaciones. 

También hay que dejar de naturalizar que un niño piense que el agua viene en botella, porque nosotros  hemos tomado agua de la canilla o de la vertiente en las lagunas interiores de nuestros humedales que no estaba contaminada.

A estos jóvenes que luchan, los jóvenes son luchadores, que también puedan ver estas cosas, porque no son cuestiones aisladas, porque a veces  los más luchadores de estos jóvenes, después están presos de estructuras partidarias a las cuales obedecen dogmáticamente y son los peores traidores a las banderas y a los derechos que ellos levantan.

Hay mucho por hacer, hay que desmontar estos cinco siglos de tragedia y de genocidio, de colonialismo, de racismo, de patriarcado, de machismo que vino con el capitalismo eurocentrado, no son fenómenos que vinieron desagregados, tenemos que ver esto para poder resistir a tiempo.


J A R:

Claudia muchas gracias, para nosotros es un honor tenerte en nuestro programa y que puedas transmitir esta vocación de lucha y de resistencia.

¡Hasta la victoria siempre!


C G:

Hasta la victoria siempre, a seguir pensando juntos como hacer para frenar al capital y al mercado para seguir defendiendo los territorios para la vida.


ENTREVISTADOR: JUAN ALBERTO RAMBALDO

Programa N° 57