MENSAJEROS

De la mano y con la sagacidad de Pier Giorgio Caria, Giorgio Bongiovanni contestó algunas preguntas en español que me dan pie para hablar sobre algunos de estos importantes conceptos de los que habló y de los cuales, comencé a hablar en la radio en los años 90, tolerando que hasta mis amigos nos tildaran de locos. 

Por Juan Alberto Rambaldo

En aquel momento hacía un programa de radio con mi primera esposa Liliana, ya fallecida. Hasta mi hermano ocultaba ante sus amigos las cosas que expresábamos en esos programas y hasta algunos, llegaron a pensar que la nuestra era una postura para parecer diferentes… y sí, lo eramos, nuestra posición era muy distinta porque fuimos los primeros en vincular la presencia extraterrestre con los libros sagrados.

Imagínense ustedes las reacciones de la gente, que cuando les hablábamos de extraterrestres nos miraban como a loquitos y cuando comenzamos a ligar la vida extraterrestre con las ideas religiosas clásicas ya pensaban que no sólo éramos locos, sino, sacrílegos. Pero el tiempo fue pasando y  la realidad nos fueron dando la razón. Lo que parecía muy loco al principio fue tomando un cauce de naturalidad bastante grande, sobre todo cuando pusimos a la vista de todo el mundo esto que Giorgio manifestaba en las conferencias de prensa.

En nuestras charlas públicas pasábamos videos de las conversaciones que Giorgio había tenido con  militares rusos y también con astronautas, en ellos relataban sus experiencias vividas en el espacio. Incluso publicamos las fotografías tomadas durante el alunizaje de Armstrong que se mantuvieron absolutamente secretas y que algún sector vinculado a esta rama de la ciencia, nos hizo llegar, eran tres fotos en donde se veía una nave desde tres posiciones diferentes que estaba despegando. 

Además, Neil Alden Armstrong que fue el comandante de la misión Apolo 11 en la transmisión con la Tierra llegó a decir, que lo que estaba viendo era algo no humano, como pueden ver en el video que hemos adjuntado. Es allí donde él saca las fotos de las que hago referencia mientras desde la Tierra le pedían cambiar de canal para que sus descripciones no salieran al aire.

También debo decir que si bien mucha gente no compartía algunas cosas que nosotros decíamos, nos respetaban porque sabían que éramos buenas personas, entonces, así como había algunos que nos denigraban había otros que nos defendían por el solo hecho de conocernos como personas.

En aquel tiempo mis experiencias con Delfo Tijero -representante de Eugenio Siragusa en Argentina- fueron maravillosas, lo voy a recordar toda la vida y lo tengo presente en cada momento, porque él me mostró las naves y lo que en aquellos momentos llamábamos "los vientos inversos" ya que el viento soplaba hacia una dirección y los árboles se movían hacia otra dirección por la acción de las naves que sobrevolaban por encima nuestro. Tal vez en otro artículo pueda explayarme más sobre este tema.

Volviendo al reportaje de Pier, llevó la puesta en escena sobre todo esto de lo que hablábamos con una base científica y con el respaldo fáctico que nos daban los militares rusos y los astronautas tanto de un lado, como del otro, sobre todo en el caso de los militares rusos, fíjense que rareza, ellos vinculaban lo que estaba sucediendo con presencia divina ya que en sus exposiciones dejaban entrever que "esos" eran mensajeros de Dios. Esto puedo comprenderlo ya que mis orígenes fueron marxistas, yo llego a Cristo a través de un análisis marxista porque comienzo a darme cuenta de que hay una ciencia que tiene bases totalmente distintas a las que nos enseñaron en la escuela o en la universidad. El positivismo tuvo un desarrollo muy importante y eso fue un crecimiento muy importante para la ciencia, pero se quedó ahí. 

La presencia extraterrestre nos abrió una expectativa que ya insinuaba Einstein cuando hablaba de la cuarta dimensión, porque él decía, que las tres dimensiones en las cuales nosotros nos basamos no daba respuestas y eso a mi, a partir de esa postura y de la lectura de AntiDhuring, de Federico Engels alcance a desarrollar en mí, la conciencia de la existencia del infinito del cual todos hablamos, pero en realidad nadie lo percibe, se dice como palabra pero no como un elemento para valorarlo en términos científicos y justamente, si no se realiza eso, es muy difícil analizar un mundo en donde el desarrollo evolutivo es muchísimo más alto que el nuestro y donde cada desarrollo evolutivo responde a una dimensión diferente.

Escuchen con atención lo expresado por Giorgio en base a sus experiencias en Rusia en dónde antes de terminar el audio, revela quién fue el que autorizó que se compartiera material militar y secreto con "el estigmatizado".